EN PRIMERA FILA POR LUIS A. CABAÑAS BASULTO
Chetumal Q. Roo 6 de noviembre de 2013.-Derivado del adjetivo latino "digno", que se traduce por "valioso", la dignidad o "cualidad de digno" se refiere al valor inherente a las personas como seres racionales, dotados de libertad y poder creador, pues pueden modelar y mejorar sus vidas mediante la toma de decisiones y el ejercicio de su libertad.
No obstante, la educación juega un papel determinante, pues el auténtico ejercicio de la libertad, más allá de la arbitrariedad del comportamiento extremo, exige la formación de la inteligencia y la voluntad, facultades específicas del espíritu humano.
Hechas estas consideraciones, la dignidad, al igual que la prudencia, son términos más presentes que nunca en el enrarecido conflicto magisterial, que involucró a dos de sus principales actores: La secretaria de Educación en el Estado, Sara Latife Ruiz Chávez, y el gobernador Roberto Borge Angulo.
Cada uno se caracterizó con cada concepto, aunque en el caso de la mujer demostró carecer absolutamente de dignidad para renunciar de una vez por todas de ese encargo, en el que solamente ha beneficiado a sus incondicionales, tal y como se esperaba, sin haber hecho absolutamente nada a favor de la educación. Lógico, no sabía ni sabe nada sobre el tema.
En este sentido, con todo y que su renuncia era una de las principales condiciones de los quisquillosos maestros para abandonar su movimiento, era muy posible que prosiguieran con o sin ella, aunque, en su caso, la altiva funcionaria hubiera demostrado su buena voluntad de coadyuvar con quien -presionado por circunstancias políticas- hace unos meses depositó su confianza en ella.
Lamentablemente para Quintana Roo, el "factor" Félix González fue uno de los motivos que orilló a Roberto Borge a nombrar a quien se supuso sería una de sus principales "colaboradoras", aunque, dada la soberbia de la cozumeleña y su falta de capacidad para el manejo de su "mano" derecha, terminaron por convertirla en una de las piedras en el zapato de Borge.
Para mala fortuna de éste, su principal obstáculo para deshacerse de ese "frijol" en el arroz es uno de los principales aliados políticos de Félix González, el yucateco líder del Senado, Emilio Gamboa Patrón, quien, ignorante del tamaño del conflicto y los tintes que adoptó éste, le exige sostenerla contra viento y marea en la Secretaría, y de ahí que Roberto Borge se encuentre atado de manos.
Hasta donde sabemos, el Jefe del Ejecutivo le pidió renunciar varias ocasiones a Sara Latife Ruiz y otras tantas veces ésta se negó con el pretexto de esperar instrucciones del "centro" -léase Félix González o Gamboa Patrón-, aunque, repetimos, el ansia de poder de la funcionaria y, sobre todo, su FALTA DE DIGNIDAD, fueron los principales obstáculos para solucionar parte del problema.
Por fortuna, el Comité de Lucha del Magisterio y la Comisión Interventora de la Reforma Educativa se reunió con el secretario de Gobierno, Gabriel Mendicuti Loría, con quien acordó inicialmente solucionar el conflicto y reiniciar clases el jueves, pero finalmente se acordó hacerlo hasta el lunes próximo, aunque desde el lunes anterior desbloquearían la carretera Chetumal-Cancún y retirarían el retén de Carrillo Puerto, en tanto el martes o miércoles se publicaría en el Diario Oficial la minuta del 21 de noviembre. Desde este miércoles deberían haberse entregado las instalaciones de la SEYC.
Irónicamente, uno más de los obstáculos para destrabar el conflicto tenía que ver con la insistencia de los maestros en negociar directamente con el mandatario, tal y como sus homólogos de la metrópoli plantean con el presidente de la república, y se niegan a hacerlo con el mismito secretario de Gobernación; en el caso de Quintana Roo los maestros se negaban a aceptar a Mendicuti. Como si no fueran interlocutores válidos o sus demandas fueran más allá de lo "oscurito".
Esto último quizá sea lo más válido, sobre todo una vez el diario Milenio diera a conocer los nombres de por lo menos 60 miembros del movimiento con órdenes de aprehensión por delitos federales y del fuero común, entre ellos ataques a las vías de comunicación, daños, lesiones y otros. Encabezados por Erangelio Mendoza González, ex líder de la sección 22 del SNTE, ex integrante del Ejército Popular Revolucionario y de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca, son miembros de la CNTE-Oaxaca.
Además del reciente enfrentamiento con policías de Cancún, cuando, apoyados por dirigentes del PRD, intentaban apoderarse de palacio municipal, el conflicto se había propagado a las comunidades rurales, como fue el caso de Nicolás Bravo, donde fueron desalojados tras mantener bloqueada la carretera Campeche-Quintana Roo por más de ocho horas. El brutal desalojo corrió a cargo de policías estatales y municipales.
El conflicto también se "trasladó" a José María Morelos, donde un grupo de rijosos que se decían maestros en contra de la reforma educativa, cerraron el lunes la carretera Dziuché-Sabán para impedir el paso de docentes que imparten clases al oriente de la cabecera y agredieron a policías cuando éstos intentaron dialogar.
Durante el bloqueo, se observó a manifestantes encapuchados, con piedras en las manos que amenazaban con agredir a los policías, así como a sujetos con machetes y otros recolectando botellas de vidrio, en tanto no cesaron de agredir verbalmente para provocar un enfrentamiento, aunque la sangre no llegó al río.
Con todo, donde estaba latente la mayor amenaza de conflicto era la cabecera de Carrillo Puerto, donde intentaban bloquear totalmente la carretera Cancún-Chetumal, aunque de un momento a otro intervendrían policías estatales y federales para su desalojo.
Quiérase o no, y aunque les pese a los inconformes, quien pudo presumir haber demostrado prudencia es el Jefe del Ejecutivo, ya que, con suficientes elementos para proceder LEGALMENTE se abstuvo de hacerlo, aunque sólo en el caso de su competencia, la estatal, ya que en el ámbito federal los maestros, que consiguieron uno de sus propósitos, dividir a la población, responderían por sus actos ante ese nivel, algunos con el dolor de su estómago y otros con el de su libertad.
Con todo, la próxima semana se pagaría la quincena pendiente, ayer se firmarían los acuerdos y ¿colorín colorado? O seguirá los cuentos de que siempre no porque a Chuchita la bolsearon. Lo único cierto es que quedó clara la falta de dignidad de quien se ha obstinado en "colgarse" de la Secretaría… y de sus "padrinos": Sara Latife Ruiz.
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