EN PRIMER FILA Por Luis A. CABAÑAS BASULTO Tras maratónica sesión que concluyó en horas de la madrugada, el pleno del Senado aprobó por 86-25 y dos abstenciones la Ley de Ingresos de la Federación 2015, en un evento donde "brillaron" por su ausencia los legisladores de Quintana Roo, el priísta Félix González y el "Verde" Jorge Emilio González Martínez.
Ex gobernador el primero, y aspirante a candidato a la gubernatura, el segundo, ninguno de los dos hizo algún pronunciamiento en torno a los trascendentales temas abordados en la discusión del dictamen, tal y como ha sido su costumbre a lo largo de toda la LXII Legislatura, y mucho menos en tratándose de situaciones que interesan a Quintana Roo. Sólo sirven para hacer "montón".
En esta oportunidad, irónicamente, quienes sacaron la casta por el Estado fueron dos legisladores del norte del país, los senadores panistas Carlos Mendoza Davis y Ernesto Ruffo Appel, joven abogado de Baja California Sur, y el primer gobernador de oposición de México en 60 años, respectivamente.
Ambos lucharon acaloradamente por revertir la reforma hacendaria del año anterior sobre la homologación del IVA al 16% en las zonas fronterizas, por la que, como se recordará, irónicamente votaron a favor nuestros diputados federales priístas, uno de ellos Raymundo King de la Rosa, otro gris aspirante a convertirse en Jefe del Ejecutivo, pero que nunca ha hecho nada por Quintana Roo, excepto hablar mucho.
La propuesta de Mendoza Davis es casi la misma de hace un año sobre la homologación del IVA, cuando el PAN se pronunció en contra, y académicos y especialistas justificaron con estudios que ocasionaría alto impacto negativo en la economía de los Estados de esa región, que afecta a más de 10 millones de mexicanos.
En efecto, el boletín número del Observatorio de Coyuntura de la Economía Fronteriza, publicado en junio de este año, basado en indicadores de instituciones oficiales como el INEGI, BANXICO, IMSS y CONEVAL, entre otros, confirmó las proyecciones negativas en rubros como inflación, recaudación y competitividad.
Las cifras no dejan lugar a dudas: A causa de la homologación miles de mexicanos cerraron sus negocios, otros tantos perdieron sus empleos y vieron reducido considerablemente su poder adquisitivo, en tanto que, según BANXICO e INEGI, la inflación acumulada en el primer trimestre en la región es significativamente mayor comparada con los tres años anteriores, en particular Mexicali, con 5.41%, Quintana Roo (4.57%), Tijuana (4.56), Ciudad Juárez (4.21%), Matamoros (4.06%) y La Paz (4.81%)
Esta irresponsable medida afectó el consumo de hogares, especialmente en la adquisición de alimentos, relacionado con el nivel de bienestar de la población, ya que las zonas fronterizas destinan el 57% del ingreso al consumo de alimentos básicos, lo que se traduce en casi 6 puntos porcentuales más en comparación con el resto del país. Habrán de tener cuidado porque un estómago hambriento -enseña la historia- no tiene oídos.
En aquel entonces, sólo el PAN se rehusó a ser cómplice de la reforma por calificarla de injusta, inoportuna e irresponsable, ya que, además, el aumento al IVA disminuyó el ingreso familiar, generó desempleo y, como consecuencia, mermó la tasa de ahorro de las familias.
De acuerdo a indicadores del INEGI, las tres entidades más impactadas por la homologación al cierre de 2013 muestran altas tasas de desempleo: Baja California, 4.47%: Baja California Sur (4.975%) y Quintana Roo (4.32%)
Además, de acuerdo al IMSS, no sólo lastima el nivel de desempleo, sino que el fenómeno se muestra en las empresas de estos lugares, donde el saldo negativo derivó en que unas 217 empresas formales cerraran sus puertas.
Asimismo, influyó en la fuga de consumidores de la frontera norte hacia el mercado de bienes y servicios del sur de Estados Unidos, donde se observa una tendencia creciente de cruces por la frontera, así como de mayores índices de consumo. En el caso de Quintana Roo, hacia la Zona Libre de Belice.
Las cifras anteriores denotan la urgente necesidad de restablecer la tasa del 11 por ciento en la región fronteriza por tratarse de un tratamiento diferenciado perfectamente compatible con el principio de equidad tributaria que prevé el artículo 31 fracción IV de la Constitución.
Las condiciones especiales del mercado en esas regiones alteraron los patrones de consumo, por lo que es necesario un trato diferencial para detener la afectación de su economía y competitividad, y este miércoles tuvieron la oportunidad de beneficiar a millones de mexicanos, toda vez que cifras que se publican repetidamente demuestran que la reforma fue una equivocación y no debían permitir que se cometa el mismo error.
Estaba en sus manos reparar el mal que hicieron a más de 10 millones de habitantes para devolverles empleos a quienes los perdieron, generar empresas donde se perdieron, dar oportunidades a quienes perdieron la esperanza e incrementar la competitividad.
A falta de los representantes "populares" de Quintana Roo, Mendoza Davis propuso adicionar una fracción XIII al apartado A del artículo 16 de la minuta del proyecto de la Ley de Ingresos para retomar el texto anterior a la modificación del año pasado para quedar como sigue:
"Artículo 16, inciso a), fracción XIII: Se otorga un estímulo fiscal que consiste en aplicar la tasa del 11 por ciento para el cálculo del Impuesto al Valor Agregado, cuando los actos o actividades por los que se deba pagar este impuesto se realicen por residentes en la región fronteriza, y siempre que la entrega material de los bienes o la prestación de servicios se realice en esa citada región".
Tratándose de importación, se aplicará la tasa de 11 por ciento, siempre que los bienes y servicios se enajenen o presten en esa región. Tratándose de enajenación de inmuebles, el IVA se calculará aplicando el 16%".
Para los efectos de este estímulo, se considera región fronteriza, además de la franja fronteriza de 20 kilómetros paralela a las líneas divisorias internacionales del norte y del sur del país, todo el territorio de Baja California, Baja California Sur y Quintana Roo, así como los municipios de Caborca y Cananea, Sonora, y la región parcial de Sonora"
Pero no hubo "de piña". Triunfó el partido por el que siempre vota Quintana Roo: El PRI.