Ya se cumplieron dos años de que el mando de la cárcel pasó a ser estatal y dejó de ser municipal, así como la administración de la misma y al parecer esa no es la falla como se les hizo creer a los ciudadanos al principio de dicho cambio, cuando se alegaba que la corrupción reinante dentro de la prisión cancunense era propiciada y solapada por el gobierno muncipal de Julián Ricalde Magaña; pero resulta que a pesar de que esta prisión ha pasado a ser administrada por el gobierno estatal y el control penitenciario lo ha tomado el gral. Bibiano Villa, ñlas cosas están peor ya que en repetidas ocasiones los custodios ha sido participes de la red de corrupción y los mismos policías estatales son quienes permiten el paso de todo, menos de alimentos, que el reglamento prohíbe.
Al decir todo incluye machetes para que los presos protagonicen batallas campales con saldos de decenas de heridos; como la ocurrida el 8 de octubre pasado, donde los Sureños perdiéron el choque de reos contra los Pachucos, quienes no permitieron que les sigan cobrando a sus familiares la cuota para permitir que los visiten.
Una tarea más que tiene pendiente el titular de seguridad publica del estado, meter al orden a los mas de 1500 presos que se encuentran en Cancún.
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